Los fertilizantes aditivos son productos diseñados para complementar la acción de los fertilizantes principales, proporcionando nutrientes adicionales o mejorando la eficacia de los nutrientes presentes en el suelo. Estos aditivos pueden tener diferentes funciones y se utilizan para abordar necesidades específicas de las plantas o del suelo. Aquí te menciono algunos tipos comunes de fertilizantes aditivos y sus funciones:

1. **Micronutrientes**: Los fertilizantes aditivos que contienen micronutrientes, como hierro, zinc, manganeso, cobre, boro y molibdeno, pueden ser utilizados para corregir deficiencias específicas de estos elementos en el suelo o en las plantas. Las deficiencias de micronutrientes pueden manifestarse en síntomas como decoloración de las hojas, deformaciones o retraso en el crecimiento, por lo que la aplicación de fertilizantes aditivos puede ayudar a prevenir o remediar estos problemas.

2. **Correctores de pH**: Los correctores de pH son fertilizantes aditivos que se utilizan para ajustar el pH del suelo hacia un rango óptimo para el crecimiento de las plantas. Por ejemplo, el sulfato de aluminio puede utilizarse para acidificar el suelo y bajar el pH, mientras que la cal agrícola se utiliza para aumentar el pH y reducir la acidez del suelo. Mantener un pH adecuado en el suelo es importante porque influye en la disponibilidad de nutrientes para las plantas y puede afectar su salud y crecimiento.

3. **Potenciadores de la fertilidad del suelo**: Algunos fertilizantes aditivos están diseñados para mejorar la fertilidad del suelo y promover la actividad microbiana beneficiosa. Por ejemplo, los productos que contienen microorganismos beneficiosos, como bacterias y hongos micorrízicos, pueden ayudar a descomponer la materia orgánica y liberar nutrientes para las plantas. Otros aditivos, como el humus de lombriz, pueden mejorar la estructura del suelo y aumentar su capacidad para retener agua y nutrientes.

4. **Biorreguladores**: Los biorreguladores son fertilizantes aditivos que contienen compuestos naturales o sintéticos que regulan el crecimiento y desarrollo de las plantas. Por ejemplo, los extractos de algas pueden estimular el crecimiento de las raíces y aumentar la resistencia de las plantas al estrés ambiental, mientras que los aminoácidos pueden mejorar la absorción de nutrientes y promover un crecimiento más vigoroso.

Los fertilizantes aditivos pueden ser una herramienta útil para mejorar la fertilidad del suelo, corregir deficiencias de nutrientes y promover un crecimiento saludable de las plantas. Sin embargo, es importante utilizarlos de manera responsable y seguir las recomendaciones de dosificación del fabricante para evitar problemas de exceso de nutrientes o contaminación del suelo y el agua.